1° de mayo: Día Internacional de las Trabajadoras y Trabajadores

Se trata de una jornada en la que se conmemora un día de lucha por mejores condiciones de trabajo, que tuvo lugar allá por 1886. A lo largo de la historia se han alcanzado derechos laborales, sin embargo no se bajan los brazos para continuar luchando por los que faltan. 

El primero de mayo de cada año se conmemora el Día Internacional de las Trabajadoras y los Trabajadores en homenaje a los «Mártires de Chicago», un grupo de sindicalistas socialistas y anarquistas que fueron ejecutados en 1886 en Estados Unidos por realizar un reclamo laboral.

El reclamo recitaba la reducción de la jornada laboral a 8 horas, ya que solían trabajar hasta 16 horas diarias. Ante el aumento de los paros y la presión social el presidente de Estados Unidos de ese entonces, Andrew Johnson, promulgó una ley que establecía las 8 horas de trabajo diario. Sin embargo, el sector empresarial decidió hacer caso omiso a la normativa, por lo que lxs trabajadores de la ciudad industrial de Chicago iniciaron una huelga el 1 de mayo.

A pesar de los derechos laborales alcanzados por las luchas sociales en el transcurrir de la historia, siguen quedando sectores de la sociedad asilados de un completo cumplimieto de tales derechos como lo son las mujeres y el colectivo LGBTIQ+. 

Nos encontramos bajo la economía capitalista que genera exclusión, desigualdad e injusticia  que se representa en, por un lado, la situación de desempleo y precarización laboral en el ámbito del trabajo asalariado, así como la brecha salarial entre varones y mujeres y la no completa inserción laboral del colectivo trans; por el otro sumado al trabajo catalogado como “productivo” a las mujeres se les suma el trabajo de cuidado de adultos mayores y de niños, niñas y adolescentes.

En la escala de valores de la productividad económica capitalista, queda invisibilizado el trabajo que realizan las mujeres en el seno de la familia como en la comunidad, que aportan el bienestar y la sostenibilidad de la vida social y económica.

La organización portal Economía Solidaria considera “abordar una reorganización de todos los trabajos. Esto supone, por un lado, que los hombres deben incorporarse a la responsabilidad del sostenimiento y cuidado de la vida y, por otro, que las mujeres deben acceder al ámbito de toma de decisiones en el espacio público. Asimismo se debe realizar una revisión de la masculinidad hegemónica basada en ciertas dosis de privilegios de género a los que hay que renunciar”.

Recordamos la problemática que conlleva el techo de cristal que pesa sobre las cabezas de las mujeres, el cual es un obstáculo invisible en la carrera laboral de las mismas, difícil de traspasar, que les impide llegar a cargos de mayor responsabilidad,  liderazgo y de toma de decisiones.

Desde el Área de Género y Diversidad Sexual celebramos el día de las trabajadoras y trabajadores, sin embargo seguimos en la lucha por mejoras en las condiciones laborales, por empleos inclusivo que garanticen el ejercicio pleno de los derechos sociales de la ciudadanía para todas las personas, como también reclamamos el cupo laboral trans.